Un año ha pasado de la expropiación del 51% de YPF y el balance resulta positivo y alentador. Según el informe “YPF: un año en manos argentinas”, realizado por el GEENAP (Grupo de Estudio de Economía Nacional y Popular) el futuro de la empresa es promisorio.La empresa se constituyó al mes de mayo de 2012 en un 6,43% en manos de REPSOL (empresa española expropiada), 17,09% en la bolsa de valores, 25,46 % Grupo Petersen (empresa de Eskenazi), 24,99% para las provincias, y el 26,03% restante para el Estado Nacional (51,02% estatal). Al mes siguiente Petersen decide vender sus acciones con lo que Repsol queda con el 12%, un 8,4% para Carlos Slim (el magnate mexicano, segundo más rico del mundo según Bloomberg), y un 11% repartido entre cuatro entidades bancarias (Crédit Suisse, Banco Itaú, Standark Bank y el Citi Bank).
En el año que la petrolera argentina lleva el control del Estado ha mostrado algunos balances positivos. La extracción de petróleo registró un crecimiento del 2,2% interanual, en contraste con 3 años consecutivos de merma en la extracción, siendo el peor de todos el 2011 con una caída del 7,6%.
Además se logro reducir el menguamiento que viene sufriendo la extracción de gas (un 2,3% en 2012 contrastando con el 10,4% del 2011). También se registró una merma del 0,6% en la producción de hidrocarburos en general, siendo que en 2011 la misma fue de 8,3, el pronóstico para el 2013 resulta alentador.
Desde el punto de vista económico, las ganancias fueron $7.903 millones, un 9,9% más que en el 2011. Un factor importante fue la colocación de los denominados “Bonos YPF” que en las dos primeras convocatorias lograron una gran adhesión, llegando a una recaudación de $772 millones, a partir de 25.000 ahorristas. Gracias a la calificación de Fitch Argentina (AA) la tercera convocatoria podría llegar a sumar $450 millones más.
Otro aspecto a resaltar son los acuerdos firmados con Chevron y Brindas Holding. El más reciente, prevé la explotación de los más de 100 pozos de Vaca Muerta, donde Chevron planea invertir unos mil millones de dólares. Mientras que Brindas, tiene planeado realizar la explotación de petróleo no convencional en el sur del país con una inversión superior a los U$S500 millones.
La mala administración que REPSOL dio a YPF va a llevar tiempo revertirla, pero el panorama resulta alentador, ya que la nueva gestión está decidida a darle un nuevo rumbo. Es vital para el sector energético que la petrolera argentina realice una explotación inteligente de los hidrocarburos, debido a que son un recurso clave, tanto en la economía local como mundial.
YPF prevé para los próximos 5 años aumentar la producción de gas en un 30% (se destinaran 6.500 millones de dólares para perforar 1.160 pozos), aumentar la producción de crudo en un 29% (50 nuevos pozos anuales), producir 100.000 barriles diarios de petróleo no convencional y generar 10.000 nuevos puestos de trabajo.
Para esto se espera un pronóstico de inversión de 37.200 millones de dólares. El 70 % de ese monto saldrá de las ganancias mismas de la empresa, mientras que el restante la empresa deberá conseguirlo a través de la venta de acciones en el mercado financiero y de inversiones de empresas extranjeras.
Como se esperaba, ya con esta planificación se marca una diferencia fundamental con respecto a lo que fue la administración de REPSOL. Esta última, manejada por la lógica perversa de la renta, priorizó la obtención de riqueza tachando la inversión productiva, viéndola como un gasto innecesario, abultando la transferencia de riquezas al exterior. Política que determinó el vaciamiento de la empresa petrolera.
El Estado, a cargo de YPF, ha devuelto un poco del espíritu que supo tener. Retomando la reinversión para la exploración y la explotación y dándole una configuración más propicia para las necesidades energéticas de un país que pasa por una reindustrialización.
Fuente: http://rinacional.com.ar
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